jueves, 27 de agosto de 2009

Escena 5: "Las puertas de la percepción"

Le subí a The Doors y "The end" cuando tome real conciencia de las cosas, en uno de esos gloriosos instantes donde la marihuana me dejo descansar de sus efectos y me puse a hacer algo que nunca antes habia hecho entre el momento en que se acababa el carrujo y prendia otro de inmediato: Pensar.

Que poca madre.Todo ese tiempo fumando y ni un minuto para pensar.

De mi boca, salían volutas de humo y de las bocinas de la grabadora acordes que se disolvían entre la realidad y la alucinación... Janis joplin, Jimi hendrix, John lennon, Jim morrison...y Julieta... Cuanta letra "J" en mi vida y cuanta coincidencia. Janis, jimi, john y Jim aparecian efímeros, desgarradores en sus canciones... Julieta, aparecia igual, pero solo a mitad del viaje, de tal suerte que no podia saber si era producto de la marihuana o era ella real, y regresaba a la guarida, a ese hoyo funky solo cuando necesitaba abastecerse de hierba (que yo compraba) y caricias inmorales(que yo le daba). Fuera del faje y la hierba, solo compartiamos el gusto por los Doors.

Pero no podia ser una alucinacion... Yo sentia su humedad, su sudor, su saliva y la textura de su piel... A mi nadie podia convencerme de que Julieta era una mujer ficticia. Incluso una vez recuerdo (a medias), haber rechazado una jeringa con heroína de sus delgadas y cuidadas manos. Recorde que Jim, nuncen su vida se inyecto nada, aunque el hubiera querido probar de todo... Le era imposible: Tenia fobia clínica a las agujas, y yo, por mi parte tenía fobia de volverme loco. Primero y antes de experimentar con mas sustancias tenía que saber si mi mujer de ensueño era real o ficticia. Y en caso de ser real tenia que averiguar si era Julieta mi amante o solo mi dealer. Ese día, me sentí mas drogado de lo normal y solo acerté a decirle "Love me two times", tirando la jeringa lejos de nosotros. Ella se rio, y el humo de la cannabis escapó de su boca por un breve instante. "Touch me" dijo entonces, riendo. Me dirigia a besar esa boca queno sabia si era producto de mi Alterado cerebro o eran los labios carnosos y bien formados que estaba ya acosumbrado a sentir por todo mi cuerpo cuando me pare en seco y le pregunte sin rodeos, en un momento de lucidez "¿Eres real, verdad?" .

"You make me real" dijo, contestando con otra cancion de Morrison. Callo mi boca con la suya dejandome mas confundido que al principio. Senti su real humedad y entonces, entre canciones de Los Doors y mas humo que provenía de nosotros mismos, pensé que yo, como el mismo Jim Morrison, solo estaba explorando los límites de la realidad. No mas, no menos.

domingo, 9 de agosto de 2009

Escena 4: Recapitulando

-Mira nomás- pensé -¿Quien iba a decir que ahora tantos años después me iba a acordar de las clases de filosofía? y me iba a percatar de que Blake tenía razón: “Si las puertas de la percepción fueran depuradas, todo aparecería frente al hombre tal cual es: Infinito”.

Precisamente así lo creí en un principio, pero ahora, una vez fuera de ese estado, deseo recapitular unos momentos, no para poder describírselo a nadie, sino para concientizarme a mí mismo, estar seguro de que eso no fue un sueño… bueno, si fue un sueño, pero no como los que uno tiene todos los días al dormir.

En efecto, las cosas resultaron infinitas, nuestras mentes nuestros mundos, solo allí (y diré de ahora en mas, allí, en lugar de “En ese estado” porque he pensado que más que un estado tóxico como podría pensarse, es una dimensión diferente de la conciencia, que merece ser tratada como una dimensión diferente; solo descubrir esto, tras la primera inhalación, que me resultó áspera y amarga, me tomó algunos días de experimentación.), Solo allí estamos conectados en verdad…

Con el tiempo, el humo deja de ser amargo y se vuelve dulce, el olor que al principio te resulta molesto, te comienza a parecer agradable, pierdes el miedo, a las consecuencias legales, médicas y a las críticas sociales, se te olvidan los estigmas y las experiencias divinas se convierten en tus experiencias del momento a momento … bueno hasta que el efecto pasa, cosa que lamentablemente no toma más que unas pocas horas y con cada experiencia el tiempo se acorta, por que cuando eso pasa y creo que ya lo señalé (no lo sé, pero quiero que me quede claro) la euforia y el éxtasis se desvanecen, la realidad se recrudece y aparece tanto o más violenta y obscena de lo que la recordabas, es más ahora que lo considero, antes de la paz, de la alegría, sientes también esto, unas ansias que te comen, en lo que te dejas llevar… Una vez que estás allí tus sentidos son finos y agudos, tu visión se vuelve infinita, tus oídos pueden discernir el mas imperceptible sonido, entre los más estridentes ruidos, las ambigüedades y las extravagancias, las ideas se conectan y cobran sentido, viene después la fantasía y antes del final, te llega y te ahoga incluso, la mas completa felicidad, has “Trascendido”.

Pero todo termina, y te exhalas a ti mismo en humos azules y la grosera realidad se vuelve a manifestar ante ti…

Entonces ¿por qué no una vez más?...

-Momento, momento- empiezo a divagar- creo que he dejado claro mi punto, va uno más allá de la realidad y en la dosis correcta ella aparece, y no solo eso, se conecta a mí, a esto no había llegado, pero así es, ella fuma por que quiere- ella lo controla, ella lo disfruta…

¿Y yo? Yo lo disfruto, porque está ella, pero sufro mas el “Después” porque no está, por que es entonces cuando me cae el veinte de que no le pregunte cosas, de que en verdad no la conozco y de que ella y yo solo tenemos en común una hierba ardiente y una efímera alegría.